Oración-Vídeo: “El Pecado no está en ningún órgano del cuerpo”.

El pecado, en su sentido más lato, ha sido considerado como toda conducta que trasgrede los mandatos o preceptos de Dios, y muchos han concluido afirmando que el pecado pudiese estar diseminado a lo largo de todo el cuerpo humano en su sentido físico o en su sentido espiritual. El Espíritu Santo nos ha motivado a disentir de estas aseveraciones, que creemos con responsabilidad no vienen de Dios, y que tal vez pudieran interpretarse como verdades arrojadas al terreno de la curiosidad por las diversas ciencias que estudian al Hombre, entre ellas la psicología, la filosofía y la sociología. Empero ha de establecerse de manera inequívoca y conforme a la palabra del Señor, que el pecado no reside en ningún órgano del cuerpo, y que antes por el contrario, el mismo debe ser definido, conceptuado y tenido como una actitud, un acto volitivo, una percepción distorsionada, y en el mejor de los casos una conducta o la falta de ella causada por la ignorancia. Deslindado así el problema del pecado, en el vídeo que presentamos a ustedes se comentan algunos de estos aspectos, pero fundamentalmente lo que interesa es que se tenga presente que el pecado no existe en tanto y en cuanto nosotros no lo queramos. Un tanto igual sucede con el demonio, el cual no tiene una existencia propia en la dimensión espiritual y humana –partiendo esta última expresión de la noción de Hombre como criatura hecha a imagen y semejanza de Dios–, puesto que para que el demonio y el pecado se manifiesten corpórea o volitivamente, se necesita de nuestro consentimiento, permiso y discreción. Dios quiera que estas verdades enseñadas por nuestra Santa Iglesia Católica puedan ser digeridas por quienes comparten estos vídeos, y que las semillas del amor, del discernimiento y la sabiduría germinen en vuestros corazones y vuestras almas.