VÍDEO REFLEXIVO: “¿ SABES ALABAR A DIOS ? ”

VÍDEO REFLEXIVO “ ¿SABES ALABAR A DIOS? ”.COMENTARIO
POR PROF. DR. MERVY ENRIQUE GONZÁLEZ FUENMAYOR.
MARACAIBO .ESTADO ZULIA.REPÚBLICA DE VENEZUELA.AMÉRICA DEL SUR.
GRABADO EN VIERNES 04 JULIO DE 2008
TRASLADADO A LA RED EN VIIERNES 18 DE JULIO DE 2008

Alabar al señor es una actividad excelsa y sublime. Hay infinitos modos de alabar al señor. Hay formas contemplativas de alabanza, pero también hay formas comunicativas o verbales de alabar al señor. También se puede alabar al señor desde nuestro corazón, sin adoptar ningún tipo de actitud predeterminada. Alabamos al señor con nuestra mente, con nuestro espíritu y con nuestro corazón. No es necesario amigo lector tomar un curso en la universidad o un curso en alguna institución especializada para saber alabar a Dios. La palabra del señor contenida de la santa Biblia nos ayuda a precisar cómo debemos alabar al señor. Pero además nuestra interioridad, nuestra conciencia, esa voz que emerge con fuerza desde nuestras entrañas, grita la manera de cómo debemos alabar al señor. Alabar a Dios es tener la oportunidad de postrarnos ante el y de reconocerlo como dueño y señor del universo y de nosotros mismos. Es decirle al alfarero que el es el creador de la vasija, que la vasija somos nosotros y que esta, posee la forma, vive, se exhibe y funciona en las condiciones de modo, tiempo y lugar que el haya señalado. El lector debe entender que alabar al señor es simple y sencillamente reconocer, ratificar, expresar que Dios es nuestro rey, nuestro creador, nuestro protector, nuestro amo y señor y que sin él no somos nada. Sin su presencia no es posible nuestra vida. Gracias señor, bendito sea tu nombre, gracias señor porque por ti vivimos y por ti morimos y volvemos a nacer gracias a la resurrección anunciada por Jesucristo y en virtud de su santo sacrificio desde donde sale del sol hasta el ocaso. Entonces no se necesita estudio previo para alabar al señor. Basta con el deseo sincero, con un corazón contrito y una actitud de amor, adoración y sincero afecto a Dios para que alabemos y tengamos la certeza de que esa alabanza efectivamente llegó a oídos de Dios padre, Dios hijo y Dios espíritu santo. Pidamos entonces la intercesión de nuestra virgen madre María, madre Dios y madre nuestra para que nos ayude a expresar alabanzas a Dios, tal y como ella le alabó mediante su respuesta ofreciéndole el si de la esclavitud, para poder llevar en su vientre, cuidar vigilar y criar al hijo de Dios nuestro señor Jesús. Animo, gozo, alegría....
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Alabanza, quejabanza, agobio, alabar siempre, orar no es siempre pedir, orar es alabar, saber alabar, mecanizar.