“Un recuerdo y un testimonio imborrable: A la memoria de quien es
imposible olvidar”.
Amalia del Carmen Fuenmayor Urdaneta: “Un alma cargada de muchísima
bondad, gran solidaridad y especiales afectos por el prójimo”
“Un recuerdo y un testimonio imborrable: A la memoria de quien es
imposible olvidar” Amalia Fuenmayor Urdaneta
Amalia del Carmen Fuenmayor Urdaneta: “Un alma cargada de muchísima
bondad, gran solidaridad y especiales afectos por el prójimo”.
Mamacita el 21 de Enero del año 2003, hace once años te marchaste al
lugar de ensueño, paz, tranquilidad, reservado para quienes en su tránsito por
la vida terrenal, prodigaron todo género de cosas buenas a quienes tuvieron el
privilegio de bordear su ciclo vital.
Así viviste, Amalia del Carmen, tendiéndole la mano a cuanto ser humano lo necesitó, animaste al
desalentado, diste de comida al hambriento y agua al sediento, al enfermo le
procuraste medicamento y si no lo tenías a la mano, le obsequiaste el sincero
gesto de fortaleza, de ánimo y disposición de ayuda, la palmadita oportuna y la
oración a nuestro Señor Jesucristo y a nuestra amada Virgen de la Chinita.
Hoy tus hijos: Mervy Enrique, Wilhert Antonio, Adelmo Antonio, Magly
José y Enio de Jesús González Fuenmayor, tu hermana María Auxiliadora Fuenmayor
viuda de Bracho, tus hermanos Clímaco José y Luis (Esmeiro) Emiro González
Rubio, tus nietos, bisnietos, sobrinos, sobrinos nietos, parientes y afines,
compadres y comadres, amigos y amigas, vecinos y vecinas, mostramos nuestro
respeto por tu memoria, ejemplo y patrimonio moral, y le pedimos a nuestro
Señor Dios mantenga para siempre las infinitas bendiciones que hoy vives la
mansión celestial que ÉL preparó para ti
y que desde allí te pedimos que intercedas por nosotros, para mantenernos en la
senda del bien, de las reciprocidad, de la justicia y de la verdad, a la cual
tú le dedicaste toda tu existencia terrena y cuyas enseñanzas compartiste con
quienes te amamos y también con todos los que te conocieron.
“Canto a la inmortalidad”
“Yo soy la resurrección y la vida, quien cree en mi aunque haya muerto
vivirá… Y aquel que vive y cree en mí,
no morirá para siempre” Amen y amén…Animo, gozo, alegría.
Testimonio de amor a nuestra siempre amada y recordada: Amalia del
Carmen Fuenmayor Urdaneta, a sus once años de desaparición física ocurrida el
21 de enero del año 2003
Hoy en la Iglesia de Nuestra
Señora de la Medalla Milagrosa (La Milagrosa) nos reuniremos para celebrar la
Sagrada Eucaristía presidida por el
Padre Roberto Morales en tu nombre y en el de algunos otros difuntos. En
Maracaibo, Estado Zulia, República de Venezuela,
el Lunes 21 de Enero de 2014.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario